Día 10: Llueve y empieza a hacer frío (al fin)

¡Buenas a todos! Esta es mi primera entrada en mi diario de este viaje de mi vida que me ha llevado hasta Barcelona, y pretendo contar aquí más o menos mi día a día en esta ciudad tan hermosa capital de Cataluña.

No es la primera vez que vengo y que trabajo en este lugar, y mi novia Yin (apodo por el que yo la llamo), y que vive en las cercanías de Montjuïc, así que lo tengo muy fácil para quedarme.

Vista desde la terraza esta mañana

Mis primeros días en Barcelona han sido asentarme tras un viaje en un low cost de Jerez a la Terminal 2, de recoger todas las cosas que me he mandado por correo, y echar los primeros curriculum en varias empresas que decían estar buscando trabajadores, además de informarme sobre el tema de la lengua (aunque no es obligatorio, el Catalán es aconsejable si se viene a buscar trabajo, además de bonito). En cuanto al idioma, que es algo que a todo el mundo le preocupa, tengo la ventaja de que ya vengo chapurreando algo, y de que se me da bien aprender, por lo que pronto y con la ayuda de algún curso del Consorcio para la Normalización Lingüística tendré algo más de soltura.

Como el día de hoy está resultando algo gris, lluvioso, ventoso y más bien malo para salir, por la mañana hemos ido a dar una pequeña vuelta a comprar y tomar un café al bar de abajo (una sidrería llamada La Patatona), dónde tengo algunos amigos. Después de comer voy a pasar la tarde en casa con Yin jugando un rato al Monopoly en la WII y recibir la visita de su mejor amiga, que nos trae a su cachorrito para que yo lo conozca.

Desde la cámara de mi novia se ve mucho mejor. Las nubes que se ven son de nieve, pero aquí no suele caer, porque estamos al lado del mar.

Por lo demás, estoy contento de seguir charlando con la gente de Cádiz por Internet y con mis padres, que me dan envidia por teléfono con el tema del clima.